Según el autor del libro “termina siendo grave que la gente no comprenda cómo funciona el mercado”, y que por lo mismo no entienda que los males que le atribuye a su implementación en verdad se deben a su no puesta en marcha. Como contrapartida del liberalismo, Alejandro Sala menciona al estatismo, y tras de este vocablo no demora en consignar “sinonimias” como fracaso, pobreza, hambre, miseria.
Seguramente el autor de “El Espíritu del Mercado” sepa muy bien que al liberalismo argentino le falte aún mucho tiempo para erigirse como una facción política con chances algunas, más aún cuando no faltan “políticos demagogos que vendan ilusiones y que aseguren que se puede ser feliz por fuera del marco del mercado”. Por eso es que más allá de las diferencias que podamos mantener con Alejandro Sala, la apreciación de su notable esfuerzo literario (el libro consta de más de 300 páginas, escritas para ser entendidas) ha de redituarnos inmejorablemente al momento de desbaratar dogmas y prejuicios como asimismo para arribar a una noción pragmática sobre aquel mundo tan lleno de números y cuestiones que, desde lejos, nos parece inextricable. Gracias a “El Espíritu del Mercado” hoy podemos decir, entonces, que la economía ‘grande’ ya puede ser un asunto fácilmente abarcable por el trabajador común y corriente.Cabe destacar, por último, que Alejandro Sala presentó su libro, “El Espíritu del Mercado”, en la ciudad de Rosario (en el Club Alemán – Paraguay 462) el día miércoles 17 de Agosto a las 19 hs. La velada contó, además, con las destacadas concurrencias – en calidad de panelistas – de los señores Ricardo López Murphy, Guillermo Covernton, Federico N. Fernández y, por supuesto, su autor, quien – además – tuvo la amabilidad de concederme la siguiente entrevista:












