
Escribe: David Rey
Dos altos magistrados de la justicia de la provincia de Tucumán fallecieron «por coronavirus», según informa el portal «Contexto Tucumán«. Se trata del juez provincial Guillermo José Acosta (77) y el vocal de la Cámara del Trabajo N° 1 del Poder Judicial de Tucumán, Rogelio Andrés Mercado (70). Lo que, empero, el sitio informativo no informa es que ambos estaban completamente «vacunados» justamente contra eso mismo… que los terminó matando.

Acosta «falleció luego de haber permanecido internado casi tres semanas por Covid-19», siempre según el mismo portal. En tanto que Mercado «falleció este martes, luego de que su estado de salud se agravara por el coronavirus». Y el resto del artículo no es más que una sentida necrológica que repasa un poco la trayectoria de los aludidos.
El caso es que, conjuntamente con la noticia, circularon con fuerza por redes sociales un par de recortes de la página web del mismo Ministerio de Salud Pública de la Provincia de Tucumán en los cuales se deja constancia que ambos letrados estaban completamente inoculados contra el pretendido virus que habría terminado siendo la causa de sus respectivos decesos (ver fotos).

En el caso del juez Acosta, este recibió la primera dosis el 9 de abril de 2021 y, la segunda, el 17 de julio del mismo año. En ambos casos fue inoculado con Sputnik. Mercado, por su parte, registra haber recibido tres dosis: 18 de marzo, 06 de julio y 29 de diciembre, respectivamente (las dos primeras con Sputnik y, la tercera -«el refuerzo»- con Cansino).
El silencio de los indecentes
Que la prensa tucumana haya callado respecto de un aspecto tan significativo como es el hecho de que ambos jueces estuvieran totalmente inoculados contra eso mismo por lo que murieron, no precisa mayores elucubraciones, tratándose de que Tucumán, precisamente, es una de las provincias argentinas cuyo gobierno más ha presionado a sus ciudadanos para que se inyecten la sustancia experimental que hace hablar a todo el mundo por sus graves e incontables efectos adversos.
Ya sea por presión, por complicidad o por falta de rigor periodístico, la indecencia de haber esquivado la mención de que los magistrados estaban «vacunados» no hace más que aumentar la suspicacia en torno a los inóculos como hacia los responsables de llevar a cabo esta locura «pandemista» que tiene los días contados. Si el trabajo de la «prensa» consistió siempre en reafirmar la «eficacia» de las vacunas como en promocionarlas todo el día, tan mal hicieron su trabajo que ahora ya no tienen forma de disimular que las mismas enferman y matan indiscriminadamente. Los ejemplos están a la orden del día.
Por más que la indecencia y la brutalidad los haya llevado siempre a pretender tapar el sol con un dedo, incluso cuando no dicen nada… también terminan metiendo la pata, puesto que, como vemos en el caso actual, hay silencios que dicen mucho más que las palabras. Y la prensa, al respecto, sigue estando muy callada.

Te invito a que me ayudes a seguir haciendo PERIODISMO INDEPENDIENTE.
Podés hacerlo a través de Mercado Pago.
Clic aquí para aportar con $ 500 (pesos argentinos);
Clic aquí para aportar con $ 1000;
Clic aquí para aportar con $ 2000;
Clic aquí para aportar con $ 5000.
¿Te parece otro monto? Enviá un mensaje a info@davidrey.com.ar y te respondo con un link para realizar el pago que quieras o, bien, podés hacerlo enviando dinero a mi CVU de Mercado Pago: 0000003100047927961753 (alias: davidrey11.mp)
También podés transferir directamente a mi cuenta bancaria del BANCO GALICIA:
CBU: 00702333 30004016158682;
Alias: DAVIDREY11