Escribe: David Rey
El periodista Nelson Castro salió a “solidarizarse” con su par uruguayo Víctor Hugo Morales luego de que este fuera desvinculado de Radio Continental. Según Castro, lo mismo apareja una “mancha negra” para la democracia argentina.
No me sorprende que Nelson Castro experimente estos vaivenes ideológicos que no llevan a otro lugar más que a la completa indefinición del ser. Es lo que, bueno… uno puede esperar de él, y apostando las mejores expectativas. ¿O esperaban algo más jugado de este empleadito?
El caso es que Castro está confundido nada menos que en el hecho de pretender figurar un hecho de justicia como si fuera de injusticia. Y también se equivoca cuando ilustra una eventualidad menor como si la misma fuera “una mancha” a la democracia.
Por supuesto que es para apenarse por el triste derrotero de Víctor Hugo Morales, un profesional de la información devenido en mercachifle del resentimiento. Cómo no apenarse por una persona que no tiene mejor opción que irse a vivir a la Villa 31. Cómo no sentir vergüenza por un soberbio serial que ahora no tiene más remedio que andar lloriqueando por todos lados a la vez que invoca fantasmas… en los que nadie cree.
Pero, Nelson… el fracaso de Morales, de ninguna manera significa una “mancha a la democracia”. No se puede ser un comunicador tan irresponsable como para pretender enrostrarnos a todos los argentinos (especialmente a los muchos que elegimos un cambio en la dirigencia política) el fracaso de una persona muy bien amonestada nada menos que por su susceptibilidad a la felonía, al acomodo, a la mentira constante.
Cuando Cristóbal López dejó a un montón de periodistas sin trabajo (desde Longobardi hasta “el negro” Oro), ¿acaso salió Víctor Hugo Morales a solidarizarse con alguno de ellos? Pues ahí tenés la calaña de persona con la que vos hoy, tontamente, decís solidarizarte.
Nelson… claro, vos estás en TN, vos sos Clarín. No se puede esperar mucho, ¿no? Para qué preguntarte a vos si te parece aceptable que una persona como Víctor Hugo Morales, que pasó de condenar la obscena fortuna de los Kirchner a ser un abnegado vasallo del kirchnerismo, se merece honestamente ocupar un lugar tan importante como en Radio Continental. A vos te debe convenir que el periodismo esté lleno de inútiles acomodaticios. Es normal que empieces a asustarte… Te entiendo. La definición… es la pesadilla de la indefinición.
Pero quedate tranquilo, Nelson… Yo también lamento lo de Víctor Hugo, aunque por motivos muy distintos a los tuyos. Yo lamento que el periodismo haya caído (en el caso de Víctor Hugo) tan bajo, y lamento que lo siga haciendo.
Y te digo más: yo también celebro. Obvio, no celebro como el gordo boludo de Alfredo Casero que ahora se ufana de Morales… Desde ya, el fracaso y la desgracia del prójimo exige de nuestro debido respeto. Pero celebro que algunas cosas se vayan poniendo en su lugar. Y estoy ansioso por muchas otras cosas que esperan por estar donde se merecen estar.
Decía, otro Víctor Hugo, que “entre el gobierno que hace el mal y el pueblo que lo consiente, hay cierta solidaridad vergonzosa”. Que vos, Nelson, te hayas “solidarizado” con un transfuga como Morales… nos explica inmejorablemente quién sos, y quién fuiste durante todo este tiempo.
No es una mancha a la democracia. Es una lección de libertad. La mentira, en periodismo – y en democracia- , debe pagarse bien caro. Y que eso empiece a ser así… es algo que hay que celebrar.
Qué pena que vos no puedas celebrar.
