Santa Fe, la narcoprovincia

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Por Carlos Viana (*)

“Por sus frutos los conoceréis”  Jesucristo.

¿Seis años en el limbo?

Después de cinco años de gobierno, ninguna autoridad puede alegar ignorancia sobre los hechos graves que ocurren en su jurisdicción, especialmente sobre un asunto tan grave como el narcotráfico y sus consecuencias la drogadicción y la inseguridad. El gobierno socialista-radical de Santa Fe, es un ejemplo de este caso. Al principio nos sorprendió que el jefe de la Policía de la Provincia, había sido arrestado acusado de narcotráfico, pero después dos jefes policiales más siguieron el mismo camino, uno de ellos con despacho en la Gobernación. Lo más grave es que durante la gestión socialista del gobernador anterior de Hermes Binner, el Comisario General, Jefe de la Policía de la Provincia, había sido nada menos que el Jefe de Drogas Peligrosas.

No es ninguna novedad que las drogas como la cocaína y la marihuana, entre otras menos populares, se comercian casi libremente en la provincia incluida especialmente la Ciudad de Rosario. Tampoco es una noticia que los puertos del norte de Rosario se habrían transformado en una conexión internacional del narcotráfico, en una confluencia de la Ruta 34 que viene del noroeste y por el Río Paraná con los transportes fluviales desde que desde Paraguay confluyen en ese nudo, del cual parten ultramarinos a todas partes del mundo.

Lo cierto es que la Ciudad de Rosario se ha transformado en una ciudad donde los carteles se disputan el narcotráfico y las zonas de distribución a tiros, como fue en la Chicago de Al Capone, con narcos muertos, inocentes asesinados y jueces amenazados. La rivalidad de las bandas reflejaría la competencia entre grupos políticos diferentes, que quieren las grandes ganancias que da este vil comercio.

El gobierno socialista-radical, ha culpado en primer término a la Policía de la Provincia. ¿Es que en casi seis años no se dieron cuenta de lo que pasaba? En ese caso son ineptos, pero no es tan inocente el asunto, porque la Policía está bajo la responsabilidad del poder político y es vox populi en Rosario lo que pasa con los “dealers”, que proliferan a cualquier hora del día. La clase política no puede ignorar esto, más cuando tiene servicios de inteligencia oficiales y ad hoc.

Lo cierto es que a más de 8 meses de que estallará el caso del Jefe de Policía de la Provincia acusado de narcotraficante, ni el narcotráfico, ni la drogadicción ha disminuido en la Provincia.

Chicago y la primera caja de recaudación ilegal del Alcalde

Cuentan que en la Chicago de los 30, la primera caja de recaudación ilegal del alcalde era la policía de la ciudad. Como en México, el Comisario recaudaba para su superior que era el jefe de policía y este con el comisionado de seguridad, el que a su vez le daba al Alcalde. No queremos acusar a nadie, pero aquel caso debe servirnos para llamarnos la atención.

Antes de 1974, la Policía de Santa Fe, era una fuerza normal, que como en todos lados tenía algún corrupto coimero. Pero las cosas se agravaron a partir de ese ano. Después, a partir de 1984, el asunto se agravo con la irrupción del narcotráfico. Todos sabemos el poder que tiene el monto del dinero del narcotráfico, sobre todo con su capacidad de comprar políticos y financiar campañas electorales. No calibramos hasta qué punto puede darse este fenómeno, pero si sabemos que las autoridades hacen muy poco para terminar con este flagelo.

La inseguridad en Santa Fe

En lo que va del año ya se han producido más de 106 asesinatos, solo en la Ciudad de Rosario, superando por mucho a los años anteriores. Además de las víctimas por las guerras de carteles, la droga produce estragos en la mente de los delincuentes aumentando su agresividad. Bandas de asaltantes parten en grupos de cuatro o seis motocicletas, sin patentes y atacan juntos o se dividen las zonas de asalto. Por ejemplo en la Avenida de la Travesia y Sorento, barrio importante de Rosario, grupos de diez delincuentes asaltan a los conductores que deben detener su marcha ante los semáforos. Esto es común, como así también los asaltos a las estaciones de servicio y comercios. Las mujeres que conducen un automóvil, al parar en un semáforo, por ejemplo en la intersección de Córdoba y Vera Mujica, a una cuadra de la Terminal de Ómnibus, o en pleno centro son asaltadas por delincuentes que les rompen el vidrio de sus vehículos para sustraerles sus carteras y en algunos casos algunas salen heridas cuando se resiste. En Plena Plaza Sarmiento, pleno centro, bandas de asaltantes les roban violentamente los celulares a los transeúntes a las tres de la tarde. Durante la noche asaltantes desvalijan a los comensales de los restaurantes además de llevarse la caja del negocio. Muchas denuncias son desestimadas por la Policía y solo excepcionalmente cae un delincuente, que debido a la adhesión de gran parte de la clase política al “garantismo” de Zaffaroni, quedan rápidamente en libertad. La falta de presencia y control policial es notable. Esto es solamente una muestra del drama de la inseguridad en Rosario y en la Provincia, donde todo ciudadano honesto circula por la calle o sale de su casa con miedo.

La responsabilidad no es sólo de los socialistas, sino también de sus aliados radicales que comparten el gobierno provincial, pero también del gobierno nacional, que no pueden ignorar ni la herencia de inseguridad, ni el narcotráfico creciente, que les dejo el Gobernador Jorge Obeid, actual candidato en primer término como Diputado Nacional por el Frente para la Victoria.

La responsabilidad del gobernó nacional y del FpV

Para ser justos, no sólo el gobierno provincial es responsable. Como ellos mismos han dicho, Santa Fe es una Provincia mediterránea. ¿Cómo llega la droga a ella sino es a través de otras provincias fronterizas? El gobierno nacional tiene la responsabilidad custodiar las fronteras. Claro que esto no es excusa suficiente, que tape que el ex jefe de policía de la provincia este detenido acusado de narcotraficante. Así como el Gobierno Socialista del Frente Progresista Cívico y Social, no puede alegar ignorancia después de 5 años de gobierno, el Poder Ejecutivo nacional tampoco puede hacerlo luego de diez años de gobierno, donde se le ha advertido innumerables veces sobre el tema, en medio de asesinatos de bandas de internacionales de narcos. Menos ahora que en el reciente informe anual de la Oficina del Crimen y Drogas de las naciones Unidas (UNODC), ha declarado a Argentina como el tercer exportador de cocaína dentro de Hispanoamérica. Ya había advertido La Auditoría General de la Nación a través del Auditor General, Leandro Despouy, que en Argentina hay una ausencia deliberada del gobierno nacional para combatir el narcotráfico.

La verdad es que el gobierno nacional de Cristina de Kirchner, no ha radarizado las fronteras en diez años, a pesar de las promesas oportunas de Aníbal Fernández. Los radares móviles que se han instalado en el noroeste, son de poco alcance y solo funcionan algunas horas por día, es decir que los narcos tienen horario “Free”. También se negaron los diputados y senadores del FpV a aprobar una ley de derribo, de aviones de narcotraficantes, cuando se sabe que existen cientos de pistas de aterrizaje clandestinas. Se le ha ordenado a la Fuerza Aérea no intervenir. No solo no ha establecido una legislación especial para el tema, sino que las pocas reformas le quitan responsabilidad a los drogadictos y hasta a los “dealers”. La Gendarmería Nacional es utilizada para controlar el tránsito en vez de las fronteras y la Prefectura Naval para cuidar Puerto Madero, zona de residencia de la oligarquía gobernante, en lugar de las costas ¿Por qué el Gobierno nacional ignora el tema e inclusive actúa agravándolo?

Obeid, candidato del FpV, tampoco se ocupó del narcotráfico

Los legisladores provinciales del FpV critican pero no hacen nada. Y para colmo llevan como candidato a Diputado nacional en primer término a Jorge Obeid, cuando durante sus dos gobiernos provinciales, el narcotráfico y la drogadicción crecieron notablemente y se produjeron algunos asesinatos de policías que investigaban el tema. Ya durante sus gobiernos la droga era libremente comerciada en Rosario y el resto de la Provincia. En Reconquista un policía que descubrió una pickup con droga, a la semana apareció asesinado y otro oficial de policía, murió en un extraño accidente automovilístico, otros policías honestos fueron trasladados a destinos alejados. La inseguridad ya era moneda corriente durante los dos gobiernos de Obeid.

A ocho meses del escándalo la inseguridad se ha agravado

El escándalo de la detención del Jefe de Policía de la Provincia fue hace más de ocho meses. El gobernador socialista Antonio Bonfatti cambio al jefe de Policía dos veces y a algunos miembros del Ministerio de Seguridad, pero la inseguridad ha seguido creciendo notablemente y ni el Gobierno del Frente Progresista Cívico y Social ni el Gobierno Nacional del FpV, han tomado medidas, para asegurar la vida, la libertad y la propiedad de los habitantes de la Provincia de Santa Fe.

¿Es que sólo los asesinos, ladrones, narcotraficantes y terroristas, tiene derechos humanos?

Fuente: HACER.ORG