Escribe: David Rey
Parece que en el rock argentino no solamente hay rebeldes «de palabra» y sí hay algunas bandas dispuestas a revelarse «contra el sistema» con algo un poco más significativo que las metáforas y los acordes. Es el caso, nada menos, de la banda rosarina de mayor actualidad, Cielo Razzo, que acaba de dar un ejemplo de proporciones incalculables: ellos hacen música para todo el mundo sin absolutamente ninguna distinción.
De hecho, en un comunicado a través de redes sociales, el grupo nacido en 1993 explicó que «dado que no estábamos al tanto de la resolución del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que requiere presentar el carnet vacunatorio para poder ingresar, y nuestro deseo es que nadie esté imposibilitado de asistir. Es por esto que decidimos cancelar el show y pedimos disculpas por las molestias ocasionadas» (sic).
Cielo Razzo se proponía celebrar este 4 de diciembre en la Capital argentina los veinte años de su disco «Buenas» (2001), que incluye los singles «Sin Salida» y «Carne 2» (infaltables en cada presentación), y que le valieron a la banda un ascenso meteórico e inapelable dentro del ámbito de la música nacional. Otra vez la ciudad honraba su rol de «cuna del rock nacional».
Sin embargo, una disposición del gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires pretendió circunscribir la asistencia del público según su calendario de vacunas, dadas las actuales circunstancias. Y es ahí donde, entonces, Cielo Razzo respondió, sin precisar una postura respecto de las vacunas, con todo el peso de su música: 25 años de trayectoria, 8 discos en su haber y miles de seguidores en todo el país: ellos tocan para todos y no aceptan la idea de formar parte de ningún hecho de discriminación.
Es que hay algo que -guste o no- no puede cuestionarse: discriminar siempre es discriminar, más allá de todo matiz con el que se pretenda disimular este hecho. Y Cielo Razzo tomó una difícil y ejemplar determinación en torno a lo mismo y que quizá sea el puntapié inicial para que otras bandas «despierten» y asuman un rol un tanto más «contestatario» dentro de esta historia.
Que una banda de rock de estas características, y frente al «parate» que significaron las restricciones en torno a la pandemia, decida cancelar un show nada menos que en la principal ciudad de Argentina porque el gobierno de la misma ordenó una segregación, es algo que nos tiene que prender las alarmas. No lo hacen porque no quieren tocar y ganar plata (al menos, recuperar algo de lo que perdieron con todo este lío); lo hacen porque el compromiso con el público va más allá de cualquier eventual disposición y porque -lo más importante- no aceptan subscribirse como blandos coautores de una modalidad ciertamente discutible. ¿Desde cuándo hay que mostrar un «carnet» para entrar a un lugar?
Cielo Razzo continuará su gira por el país celebrando los 20 años de «Buenas» y cerrará el año «en casa», es decir, en Rosario, el 18 de diciembre de 2021, en La Sala de las Artes (Suipacha y Güemes). En todo lo demás, la música nunca ha dejado de sonar y la banda rosarina nos acaba de regalar una de sus mejores canciones, donde ellos no solo son los músicos sino también quienes se «la juegan» y dan el ejemplo.
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